En una sociedad que ha elegido la intoxicación como modo de vida, la idea de detox que conoce la masa es superficial e infantil, pero implica una de las más importantes labores que podrás asumir.
Eliminar los elementos tóxicos de tu vida para reactivarte y continuar tu evolución.
No hace falta demostrar el alto nivel de toxicidad del mero hecho de vivir en una ciudad, desde los químicos en comidas, bebidas, medicinas, aire, etc. hasta nuestro propio dióxido de carbono dentro de un bozal innecesario; corrígeme si me equivoco.
A pesar de que todo tu entorno insiste en fijarse solamente en los aspectos más superficiales de todo, existe una gran pregunta que debes hacerte para comenzar tu detox:
¿Por qué carajo he aceptado vivir así?
La madre de las intoxicaciones es psicológica, así como será la madre de las desintoxicaciones:
Quien quiere sanar se encontrará que el verdadero detox, lejos de ser un batido, es una aventura, un camino lleno de pruebas por superar.
Cientos de síndromes y enfermedades que creíamos tan reales como las piedras son en realidad campañas de marketing para vender fármacos.
Cientos de medicamentos están hechos para aliviar superficialmente los síntomas, y gestionar enfermos, no sanar. La "medicina" de hoy no cree en la sanación y quiere imponerte una visión corporativa de la sanidad colectiva, enfocada en el negocio y en la cual TU salud no es importante; la acompañan los medios de propaganda, películas, TV, prensa, gobiernos y sobre todo, las escuelas.
Claro que hay fármacos que funcionan y médicos que quieren curarte; el problema es que no sabes la diferencia.
Todos los representantes de las instituciones que nos controlan son parte del mismo negocio, no importa cuán bonito hable ni lo que prometa; la mentira es su modelo de negocios; no existe la izquierda ni la derecha, solo el negocio de la enfermedad, el miedo a la muerte y a la falta de dinero.
Por generaciones y con apoyo billonario hemos forjado un paradigma sanitario venenoso, insostenible, ignorante e infantil que dice: La salud está en los fármacos y que quién sabe de ello son los médicos; un paradigma que condena de irresponsable a los autodidactas, de estafadores a los que proponen visiones integrales y de lunáticos a quiénes intentan ver más allá del efecto placebo.
Y tú, luego de AÑOS de TV, te lo has creído.
Hacerte consciente de lo que comes involucra ver objetivamente a quién te vende la comida, qué ingredientes y procesos usa y con qué intención lo hace.
Madurar emocionalmente implica aprender a separar el marketing de la realidad y abandonar la idea infantil de que las grandes empresas son naturalmente responsables, amorosas y ponen tu salud por encima de su negocio.
Alimentar a otra persona es uno de los actos de amor más importantes; alimentar a otro es darle vida. La intención con la que generas el alimento se materializa en todos los aspectos del proceso de producción.
Tu detox te hará re analizar la intención detrás de la comida que compras y replantearte si quieres seguir siendo alimentado así.
Muchos creen que las adicciones que cuentan son aquellas condenadas por el mainstream (marihuana, cocaína, heroína, alcohol, tabaco, etc.).
La actitud oficial frente a las adicciones es una de las evidencias más fuertes de que el sistema sanitario NO está en pro de tu salud:
Hemos estado haciendo lo mismo.
Tu detox mental te llevará a darte cuenta de que la adicción no es un asunto de sustancias sino un mecanismo urbano de defensa tóxico, de bases emocionales, propio del deterioro de la calidad de vida en las ciudades y producto de la desconexión con el ecosistema.
Hemos sido MUY habilidosos encontrando cositas ricas a las que engancharnos para olvidar nuestras penas en vez de superarlas:
Nuestra cultura basada en el abuso, ha encontrado en los adictos la principal fuente de sustento; billones de dólares han sido invertidos en afinar mecanismos adictivos en todos los aspectos de tu vida, así como en que las veas como normales, dejes de preguntarte sobre el daño que te haces y te fijes en lo que no importa.
Hablar de adicciones es hablar de algo que todos saben, pero nadie quiere enfrentar, porque es precisamente ESO lo que se logra al ser un adicto, pero si quieres detox, debes pasar por esta prueba y superarla.
Uno de los catalizadores más potentes de tu deterioro, las relaciones tóxicas (pareja, padres, hijos, etc.) son lo mejor para engancharte, enquistarte y podrirte por décadas en un estilo de vida adictivo y fijo, incapaz de evolucionar.
Cuando intentas hacer detox total te encuentras que has estado siendo el coprotagonista y no la víctima: todo abusador necesita de un abusado.
Cuando te decides a sanear tus relaciones te topas con una montaña de tarea emocional por hacer, que has estado tapando por años; para muchos, esto es insuperable y aquí se quedan.
Para el que continúa en la prueba, le depara el descubrir lo que realmente hace falta para liberarse de ellas; sanar tus relaciones es sanar los aspectos más profundos de tu personalidad.
Ninguna prueba es tan complicada y fructífera como esta. Insiste.
El detox más importante es el socioemocional:
Nuestros países han estado viviendo una relación tóxica con gobernantes que le abusan: como la mujer que vive quejándose de un marido tóxico (infiel, mentiroso, agresivo y venenoso) pero no hace nada.
Vives rodeado de instituciones y empresas que han encontrado en tus conductas más bajas y dañinas, su modelo de subsistencia… y no van a parar por su cuenta.
Así como la mujer que ha decidido replantear su relación de pareja para sanar, nos toca pasar por una serie de etapas, esta vez considerando nuestra relación emocional con el estado y las entidades que nos gobiernan:
Para aprender que el fuego quema, debemos quemarnos; para aprender sobre la salud, debemos enfermar.
Para sanar, la humanidad urbana ha elegido el rol de quien enfermó de comodidad y dependencia, olvidándose de qué es lo natural, lo real y lo sano, apartándose de su relación con los ecosistemas y envenenándose para entrar en crisis y luego superarlo.
La mayoría de la gente está cooperando activamente en el deterioro irreversible de su salud; es como un suicidio lento y masivo. Ellos viven las consecuencias y generan todas las experiencias necesarias para aprender cómo NO se hacen las cosas.
¿Para qué?
Para que una minoría pueda hacer el trabajo de construir las bases evolutivas de una humanidad libre: emancipados de sistemas y máquinas, sanos, poderosos, ecológicos y prósperos.
El DETOX del que hablo es en realidad un viaje emocional entre dos realidades: Desde la sanidad corporativa hasta la salud natural.
Tu búsqueda de salud a través del conocimiento y la madurez emocional tiene un significado mucho más trascendental: Con tu investigación, estás generando VERDAD y balance ante gigantescos mecanismos de propaganda y billones de seguidores.
A ti te toca liberarnos de la IGNORANCIA:
• Recopilar y darle vida al conocimiento generado por maestros y aprendices durante siglos
• Conocer y controlar tus emociones
• Conocer y controlar tus respuestas psicosomáticas
• Aprender cómo vivir sanamente (alimentación hábitos y relaciones)
• Aprender a reconocer en los otros seres vivos de la tierra su dignidad y necesidad de respeto
• Enseñar a tus hijos a ser personas sanas.
El detox no es más que tu proceso de descubrimiento de tu verdadera naturaleza y gentilicio, el despertar de siglos de programación parasitaria para reconectarte con lo que te da vida y sentido.
El detox entonces, no es una causa de la salud, es una consecuencia de descubrir la verdad.
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